Papu Gómez contó cómo fue su escandalosa pelea con Lionel Scaloni

El Papu Gómez pasó de ser uno de los jugadores más carismáticos y queridos de la Selección Argentina, a irse por la puerta de atrás. En gran parte se debió por su pelea con Lionel Scaloni. Tras años de lo sucedido, el mediocampista ofensivo rompió el silencio sobre lo ocurrido.

Luego de dar positivo en antidoping, se retiró del fútbol de manera profesional. Para colmo, sus últimos años de carrera no fueron para nada bueno. Pasó de ser ídolo en el Atalanta, a alguien que se querían sacar de encima tanto en Sevilla, como en el combinado nacional.

Cabe recordar que lo del doping no fue lo único que generó polémica en este caso. Además de esto y el conflicto con el oriundo de Pujato, también tuvo un duro enfrentamiento con Lionel Messi, de quien se burló y bromeó con tener intimidad con su mujer, Antonela Roccuzzo.

Por este motivo, alejado del campo de juego y aun disfrutando de haber sido campeón del mundo, el ex jugador de Arsenal de Sarandí dialogó con el medio italiano Cronache Di Spogliatoio. Allí reveló cómo fue su primera pelea con el director técnico de la Selección Argentina.

"Era nuestro partido contra Holanda y se jugaba Brasil-Croacia. Íbamos en autobús al estadio, gol de Brasil. OK, Brasil gana fácil; ahora tenemos que ganar nosotros. Sabíamos que contra Brasil era el único partido que podíamos perder, que era el partido", comenzó.

"Con los demás teníamos confianza para ganar; pero Brasil, obviamente, es Brasil. Llegamos al estadio, gol de Croacia. Festejamos. Ya estábamos todos cambiados para el calentamiento, y los penales. Celebramos la tanda de penales que ganó Croacia como si fuera un partido que ganamos nosotros", sumó.

Y agregó: "Lionel Scaloni vino y nos insultó. Dijo ‘¿Qué m… están haciendo? Vamos concentrados p…, tenemos que ir a jugar’. Y estábamos todos abrazados, porque teníamos tanta confianza porque sabíamos que contra Holanda era imposible perder. Sabíamos que fuera de Brasil íbamos más o menos camino a la final".

"Nos subimos al avión: 25 horas de viaje. Llegamos a Buenos Aires y nos esperaban 50 mil personas. Al día siguiente, sin embargo, eran 5 millones. Al final de la fiesta, tomé un taxi a casa con mi familia. Estaba completamente quemado, no podía ni sentarme”, cerró el Papu Gómez.