(VIDEO) El nadador hipoacúsico al que los padres le habían armado un andarivel con chapas y ramas, recibió una piscina de regalo
Un fabricante de piletas se conmovió con la historia de Sebastián Galleguillo y le donó una para que la use con sus compañeros de equipo.
En los últimos días hubo una historia de amor que logró trascender por todos los protagonistas que formaban parte de ella. Por un lado, estaba Sebastián Galleguillo, un nadador hipoacúsico que con su inquebrantable voluntad se las ingenió para seguir entrenando a pesar de la cuarentena, y por otro lado estaban los papás de Sebastián, que le armaron una pileta climatizada con chapas, plásticos y troncos.
Ninguno de los tres se imaginó el alcance que iba a tener semejante acto de amor, pero pasó. El joven de 18 años, que se prepara para las Sordolimpiadas a desarrollarse en 2021 en Brasil, no pudo creer el llamado que recibió el domingo por la tarde. Del otro lado del teléfono estaba Justina, novia de un empresario de piletas cuyo motivo de contacto dejó con la boca abierta a Sebastián y sus padres.
“Hola Marta, estuve todo el día intentando contactarte. Mirá, mi novio tiene una fábrica de piletas y queremos regalarle una para que Seba pueda entrenar con sus compañeros pero te hablo yo porque él está llorando”, relató la pareja del empresario a la madre del nadador. Sin poder creer lo que escuchaban los papás del joven también se emocionaron y agradecieron tremendo gesto.
Horas más tarde un camión enorme estacionó sobre la calle de tierra donde está situada la casa de Sebastián. Ante el asombro de la familia, el vehículo de gran porte descargó una pileta de 12 metros de largo por 3,40 de ancho y 1,60 de profundidad. “Sinceramente es algo que no me lo esperaba. Es impresionante. ¡¡Fah, es enorme!!”, expresó con emoción el nadador y a la vez dijo que invitará a todos sus compañeros de equipo.
LA HISTORIA COMPLETA DEL JOVEN ACÁ
