Alejandro Fantino lloró por el precio que le llegó de la factura de luz y causó indignación: "¿Cómo hago yo para pagar?"

El contexto inflacionario y la crisis económica que mantiene al país al borde del estallido social, entre aumentos y recortes, no excede a ningún estamento. Es así que el propio Alejandro Fantino expuso su preocupación por los valores estratosféricos de los servicios como la luz.

El periodista como parte como socio de Neura expresó su malestar: “Esta es una empresa, Neura, que tiene streaming, Twitch, Youtube y también tiene radio, 89.7. Somos un grupo de socios y acaba de llegar la factura de luz de la planta transmisora de la radio. No somos Radio Mitre, no somos Radio Rivadavia. Somos 89.7”.

Alejandro Fantino aclaró que se compromete a pagar el monto millonario que debe por el servicio, pero dejó en claro su preocupación por los valores incongruentes que tienen que pagar pequeñas empresas, al borde de la quiebra.

Sin más preámbulos Fantino expuso un valor increíble de $4.294.566 por el servicio de la luz: “Ahí va el número. ¡Cinco millones de pesos casi!. Lo vamos a pagar, por supuesto que lo vamos a pagar”.

“Ahora, ¿qué hago yo?¿Que te encarezco?. Se lo pregunto a ustedes. ¿Qué encarecemos?. Es como que yo diga ‘a partir de ahora el súper chat mínimo son 50 dólares’. Y no, no te lo puedo decir. Decime entonces qué pasa con una empresa común y corriente”, disparó.

Si bien evitó apuntar de manera directo al gobierno de Javier Milei, Fantino dejó en claro que la situación actual pone en riesgo el proyecto que lo tiene al frente: “Yo lo voy a decir abiertamente a esto, a mi me encanta hacer comunicación, laburar en Neura y hacer este fenómeno comunicacional que hacemos”.

“Pero si empiezan a venir los cho***zos así los pi**azos así, mañana se va el impuesto al streaming, te viene el impuesto a tal cosa y tengo que venir a laburar pagando… No muchachos, se los digo honestamente, cerramos esto y yo me voy a laburar al canal que me de laburo”, explotó.

Por último, Alejandro Fantino bromeó con la posibilidad de ir al canal de OLGA o a Luzu: “Los llamaré a ver si me dan un lugarcito”. El presente laboral del conductor parece haberlo acorralado ante una deuda millonaria que suena como una primera alarma.