Por qué Marcos de Gran Hermano estuvo a punto de morir de chico

Gran Hermano está llegando a su final. Tras más de cinco meses de éxito, en los que se convirtió en el programa más visto de la televisión argentina y también en el más comentado en redes sociales, el reality show de Telefe entró en su recta final.

El pasado domingo fue la última gala de eliminación y se definió quiénes acompañan a Marcos Ginocchio, el primer finalista, en la gran final. Con la definición entre Romina y Nacho, y con Julieta siendo la primera salvada de la placa, se determinó que la exdiputada abandonará el juego y que el sea el joven quien se sume a sus compañeros en la última semana de competencia. 

Lo cierto es que estos últimos días en la casa de Gran Hermano han sido difíciles para todos. Los emotivos reencuentros con sus familiares y seres queridos sensibilizaron a los participantes y les hicieron recordar más a flor de piel las ganas que ya tienen de salir del aislamiento.

Uno de los que se mostró más movilizados fue Marcos, quien tras la visita de su papá decidió contar algo de su pasado del que tan reservado es. En una charla sobre experiencias cercanas con la muerte, el joven finalista contó que en más de una oportunidad estuvo a punto de morir y que una de ellas fue cuando se cayó en una fosa de autos.

"Cuando era chiquito, me acuerdo que estábamos cargando nafta y yo me fui alejando, me fui alejando y había una fosa de autos que estaba bastante salida o que estaba como mal construida. Bueno, ahí me tropecé y me caí y no me acuerdo de nada”, relató.

Marcos aseguró que afortunadamente salió ileso y que no recuerda exactamente a que edad fue: "Nadie podía creer que no me haya pasado nada. Como que caí muy bien, y fue como un desmayo… Nadie entendía nada. Yo no tenía nada, pero era súper profunda esa fosa de autos”.