El particular animal que coleccionaba Ariel Rodríguez Palacios de chico

Ariel Rodríguez Palacios se consagró como uno de los dueños de la audiencia televisiva de todos los mediodías, a través de su exitoso ciclo 'Ariel en su salsa' que se emite por Telefe. El chef se convirtió en un clásico, y no sólo todos tienen en cuenta sus consejos dentro de la cocina, sino también sus divertidas anécdotas.

En este contexto, como parte de la reciente emisión del programa y mientras estaba explicando el paso a paso de una receta, Rodríguez Palacios motivó a sus panelistas a contar cuáles eran sus juegos preferidos de la infancia. Allí, cada uno empezó a dar su postura.

El conductor de Telefe fue entonces que confesó que sus juegos favoritos eran en la calle, costumbre que resultaba muy habitual hace un par de décadas en varios niños, aunque la realidad, inseguridad y la propia virtualidad hizo que esta costumbre se pierda  un poco.

"Mis juegos favoritos eran en la calle", dijo Ariel, para luego añadir: "Me gustaba mucho jugar con un autito de plástico con la cucharita en la punta y con un ladrillo dibujaba un circuito en la calle y con el autito lo recorría. Competíamos a ver quién llegaba más lejos y el autito estaba relleno no con plastilina sino con brea".

A esto agregó: "La parte que más me gustaba era buscar la brea en el asfalto, prender fuego un cacharrito, derretir la brea y esa brea fundida se la metía adentro del cochecito. Se ve que ya me gustaba el fuego de chico y le mando un beso a los de Vialidad, que se preguntarían quién se llevaba los pedazos de brea de la calle".

Esto generó una fuerte atención por parte de todo su panel, integrado por Mica Viciconte, Nico Peralta y Romina Pereiro. A todo esto, el conductor siguió envalentonado, explicando los pormenores de cada uno de los juegos y las actividades que tenía en su niñez.

"Después tuve la época de armar carritos de rulemanes y tirarme por la bajada de Urquiza, en Florida. También iba al río y me metía en los tubos de desagüe; ¡pero eso no lo hagan! Era otra época, la vida que había y nos divertíamos en la calle, sin tecnología", contó.

Sin embargo, antes de cerrar el tema, confesó el particular animal coleccionaba de chico: "Otro verano, que me liberé de la colonia de vacaciones, me la pasé pescando renacuajos. Había zanjas cerca de las vías del tren, juntaba renacuajos y los criaba en mi casa. Mi viejo seguro que eso no lo aprobaba y a mi mamá no le quedaba otra".