Qué pidió Santiago del Moro en el confesionario de Gran Hermano

Por primera vez, y para sorpresa de todos los jugadores, Santiago del Moro ingresó en la casa de Gran Hermano sin aviso. Los participantes, quienes estaban relajados en el jardín, vieron entrar primero su valija y, aunque muchos especularon con el regreso de Coti, fue el conductor del reality quien traspasó la puerta.

Luego de probar la salsa que estaban cocinando para la cena y mostrarles el fantástico auto por el cual competirán esta semana, Santiago del Moro ingresó en el confesionario y tuvo un mano a mano con Big Brother. El conductor de Gran Hermano no se guardó nada y dio sus primeras impresiones de la casa.

"Te quiero hacer un pedido”, sorprendió Santiago del Moro. “No sé si para esta temporada o para la próxima, pero yo quiero venir a dormir acá alguna noche, sin revelar ningún tipo de dato", agregó el conductor sentado en el sillón rojo donde cada uno de los participantes nomina cada semana.

"Me gustaría pasar una noche con los chicos, ver cómo es dormir en la casa más famosa del mundo", agregó el conductor de Gran Hermano. “Cuando quieras”, respondió Big Brother, invitándolo a su casa. Minutos antes, el periodista había contado cuál había sido sus impresiones al ingresar al lugar.

"Es increíble cuando la puerta se abre. Es como cruzar el umbral de la realidad a un tiempo detenido, es como ir a otro contexto”, confesó Santiago del Moro. “Gran Hermano es otro mundo. Entiendo que ellos se olviden de las cámaras. Yo estuve cinco minutos charlando y la casa te envuelve, te gana, te come", siguió. 

El conductor de Gran Hermano también destacó la limpieza, el orden y la “comunión” de los chicos. “Estoy superado por la expectativa. No me imagine algo tan grande. No se ve tan grande en la pantalla como lo es acá”, aseguró Santiago quien incluso bromeó con la posibilidad de nominar a los participantes.