Un prisionero violó y mató al "peor pedófilo" del Reino Unido para que sintiera lo que le hizo a casi 200 menores

Richard Huckle, considerado el peor pedófilo del Reino Unido tras haber abusado de casi 200 menores, fue violado y asesinado en la cárcel por otro prisionero. El ataque fue presuntamente perpetrado por Paul Fitzgerald, también encarcelado por delitos sexuales desde el 2009.

El objetivo, era hacerle sentir lo que vivieron sus víctimas. Los detalles de este "ataque cuidadosamente planeado y ejecutado" se dieron a conocer en el marco de un juicio en el Tribunal de la Corona de Hull (Yorkshire, Inglaterra).

Huckle fue violado con un utensilio de cocina, le metieron un bolígrafo en la nariz hasta llegarle al cerebro y lo estrangularon con cable eléctrico. Asimismo, el fallecido presentó signos de golpes en la cara y los riñones y una herida de puñal en el cuello. Cuando dos funcionarios de la cárcel llegaron a la celda, Fitzgerald se encontraba cerca de Huckle y parecía estar susurrándole algo al oído.

"Creo que lo maté, está muerto", dijo Fitzgerald a los vigilantes de la cárcel, según señaló durante el juicio el fiscal Alistair Neil Macdonald. La autopsia indicó que Huckle murió por estrangulamiento.

Un día después del asesinato, Fitzgerald admitió ante un especialista en salud mental que quería no solo matar a Huckle, sino cocinar sus restos. Además, dijo que planeaba asesinar a dos o tres personas y que "se divirtió mucho" durante el ataque que perpetró.